La mayor mortalidad y morbilidad neonatal se producen en grandes inmaduros. La insuficiencia respiratoria es la principal causa de fallecimiento de estos pacientes. Puesto que un gran porcentaje de prematuros precisan VM, la formación e investigación deben priorizar el mejor conocimiento, prevención, diagnóstico precoz y tratamiento de la insuficiencia respiratoria en general y del manejo de la ventilación mecánica en particular. En esta línea, el Grupo de Trabajo sobre Patología Respiratoria en Neonatología realiza aportaciones especialmente valiosas sobre la ventilación mecánica en recién nacidos, recomendaciones que nosotros compartimos y difundimos en el presente trabajo. La respiración y ventilación del recién nacido es diferente a la de lactantes y niños, presentando peculiaridades fisiopatológicas específicas, entre las que destacan una menor capacidad para aumentar el volumen inspiratorio, que junto con unos volúmenes residuales muy bajos favorecen el colapso alveolar. En el recién nacido pretérmino, el déficit de surfactante lleva a un colapso alveolar con pérdida de alvéolo funcionantes, disminución de la complianza, hipoventilación y aumento del cortocircuito intrapulmonar Un pequeño calibre de las vías aéreas intratorácicas con mayor facilidad para la obstrucción y aumento de las resistencias intrabronquiales. Un tiempo inspiratorio más corto, lo que determina una mayor frecuencia respiratoria.
La presencia de cortocircuitos fetales (persistencia del ductus arterioso [PDA] y foramen oval). La persistencia de circulación fetal puede producir hipertensión pulmonar, con la finalidad de entregar la información detallada el curso de 2 días cuenta con aspectos relevantes de interés para un cuidado especializado al neonato con tal requerimiento oxigenatorio.