La inmunización es una de las intervenciones sanitarias de mayor éxito costo eficaz, evitando entre 2 a 3 millones de muertes al año por enfermedades inmunoprevenibles; pero en el año 2002 un brote de sarampión en Venezuela y Colombia, impulsó a los ministros de salud de los países de la Región Andina a programar una semana anual de vacunación en las Américas.
La Semana de Vacunación en las Américas (SVA) es aceptada como una iniciativa anual con la aprobación del Consejo Directivo de la Organización Panamericana de la Salud. Los principios que conforman la base de la Semana de la Vacunación en las Américas son la equidad, el acceso, y el panamericanismo. Los objetivos de la nueva iniciativa son fortalecer los programas de inmunización regulares en las Américas, además de identificar y llegar a las poblaciones que están en riesgo de enfermedades prevenibles mediante la vacunación, debido a su falta de acceso a los servicios de inmunización. Diecinueve países participaron en la 1ª SVA, el foco primario fue la eliminación del sarampión, y a lo largo de los años siguientes se incrementó los objetivos como la vacunación de las poblaciones indígenas y personas de la tercera edad, las campañas de eliminación de la rubéola, la prevención de la influenza, impulsar el control de la fiebre amarilla y la hepatitis B, el fortalecimiento de los programas de vacunación regular, la importancia de la vacunación de la familia así como la vacunación de los trabajadores de salud y la introducción de nuevas vacunas entre otras metas.
Actualmente 45 países y territorios de la región participan en la Semana de la Vacunación en las Américas, siendo hasta el momento, la mayor cantidad de estados miembros participantes desde su inicio. Más de 47 millones de individuos fueron vacunados como resultado de la SVA.
Por todo lo anteriormente, es necesario el perfeccionamiento y la especialización del personal sanitario que labora en las unidades de Inmunizaciones para llevar a cabo el cumplimiento de las metas trazadas durante la SVA y la protección de la población contra enfermedades inmunoprevenibles. Por ello, todos los servicios de Inmunizaciones deben ser operadas adecuadamente por los profesionales de la salud actualizados y capacitados en todos los procesos que conllevan una vacunación segura, así como profundizar los conocimientos en vacunación, es importante conocer las bases científicas que evidencian los fundamentos inmunológicos en que se basa el mecanismo de acción de las vacunas, la atención oportuna de eventos supuestamente atribuidos a la Vacunación e Inmunizaciones ESAVI y el manejo adecuado de la Cadena de frío, entre otros temas tratados en el presente Plan de trabajo.