La ventilación mecánica y su aplicación, generalmente se rodeó de un manto de cierta incertidumbre, ocasionada en parte por un grado de desconocimiento de muchos profesionales ante los cambios tecnológicos y en otros, porque el saber proporciona poder que no todos quieren compartir.
Los paradigmas profundamente enraizados, se han ido sustituyendo por otros sustentados por las nuevas evidencias. Dentro de ese marco de desarrollo, se torna imprescindible la actualización permanente y mejor aún, con los profesionales de mayor expertes en el área.
La variedad de modelos y equipos pueden llegar a abrumar al profesional que quiere ingresar o recién lo hace en el área crítica, sin embargo, para brindar mayor tranquilidad, se podría decir en líneas generales, que el funcionamiento de los ventiladores en esencia es similar.
En este curso se trabajará en lo esencial y concreto en razón a los que ofrecen los equipos mecánicos, su preparación, pruebas iniciales, programación y los modos de ventilación que se aplican en el inicio de la asistencia mecánica.
Otro ítem a considerar es el de la monitorización de la ventilación. Para ello será necesario interpretar las curvas, bucles y las posibles asincronías, que ocasionan incrementos en la tasa de morbimortalidad.
Otra área de interés son los cuidados directos en relación a la instrumentación de la vía aérea como así también al acondicionamiento de los gases administrados, de acuerdo a la elección de la humidificación activa y/o pasiva.
La cánula nasal de alto flujo es un recurso técnico que se ha ido generalizado en los últimos años. Se trabajará en el conocimiento de equipos, forma de administración e indicadores para su aplicación y monitoreo.
Los cascos – Helmet es otro recurso disponible en muchas unidades, indicado para el tratamiento de la insuficiencia respiratoria leve / moderada. Su elección requiere conocer su correcta indicación, la preparación del paciente, equipo e interface, como así también su correcto monitoreo.
El paradigma ya instalado desde hace tiempo, dejo de ser innovador por lo natural que hoy resulta “la máquina se tiene que adaptar al paciente y no el paciente a la máquina”. No obstante, esa adaptación del recurso mecánico implica una gran responsabilidad profesional, disponer de un equipo de personas involucradas en el conocer, lo suficientemente motivadas para asumir el compromiso del hacer y correctamente entrenados para que el hacer sea con eficacia y eficiencia.